POEMAS
A LA MEMORIA DE MI AMOR PERDIDO.
MI DULCE AMOR.
Mi dulce amor, te has ido, te has marchado,
Dejándome tan sola y desvalida;
Tras compartir tantos años de vida,
La impune muerte de mí te ha separado.
Siempre fuiste la sombra protectora,
La cual me acompañaba noche y día;
Mas ahora mi sombra va muy sola,
se desliza sobre la tierra fría.
Tu brazo, al caminar me sostenía,
Por el mejor camino me guiaba;
Cuando mi cuerpo su paso flaqueaba,
Y el equilibrio sin querer perdía,
tu cuerpo con amor, fuerzas me daba.
Para seguir andando por la vida.
Ahora veo mi sombra que se alarga,
Cuando voy caminando triste y sola;
Los sueños vuelan, y al rayar el alba,
Mis pensamientos van a tu persona.
Tú me hiciste feliz en esta vida,
A pesar de los males que han llegado;
Fuiste mi compañero, luz y guía.
Has sido lo mejor que me ha pasado.
Yo te suplico que allá donde estés,
a Dios le pidas que siempre nos guarde;
hasta que un día nos podamos ver,
si Dios permite volver a Encontrarte.
Puri Aguila.
NÚMERO
IMPAR.
Número
impar, yo soy en esta vida,
Desde
que tú me dejaste tan sola;
siento
que soy, como una carambola,
Número
impar, que con nada combina.
Donde
quiera que voy con mis amigos,
Los
cuales van, junto a sus parejas,
Yo
pienso en ti, y triste yo me digo,
Lo
feliz que yo estaba en tu presencia
Si
voy con matrimonio, soy el tres.
Si
con grupo de cuatro, soy el cinco.
Si
con media docena, soy el siete,
Ser
el número impar, es mi destino.
Desde que
a ti, te arrebató la muerte,
Cuando
yo veo un matrimonio unido,
Es
cuando más recuerdo lo que ha sido,
Mi
vida junto a ti, ¡qué mala suerte!
La
mala suerte, es haberte perdido
Siendo
tan desgraciada como soy,
Número
impar, donde quiera que voy,
Sintiendo
gran nostalgia, de no verte.
Puri
Aguila.
PRIMER ANIVERSARIO.
Mi amor,
tan solo faltan unos días,
Para que
llegue el de tuaniversario;
la
esperanza y la fe, a ti me guían,
recordando
lo bueno que me has dado.
De nuevo
llegará la primavera,
El triste
invierno, al fin se ha terminado;
Doce meses sin
ti, me han abrumado,
Sin tu amor
apacible, sin tu espera.
Ya sé que
no vendrás a estar conmigo;
Sé que tan
sola estoy sin tu presencia;
Día tras
día me inunda tu ausencia;
Sola me
siento, sin estar contigo.
Presiento
que tu luz está a milado,
Protegiendo
mi vida desde el cielo;
Yo tengo en
ti, confianza y anhelo
De que no
olvides lo que aquí has dejado.
Descansas
en el pueblo en que naciste,
En el lugar
querido por tuspadres;
Hace ya un
año que de aquí te fuiste,
Dejando
nuestra vida miserable.
Ya se han cumplido 47 años,
Desde aquel
día que ante Dios presente,
Prometimos
ante el Omnipotente,
Hasta el
final de nuestra vida amarnos.
Durante
nuestra unión hemos pasado,
Días buenos
y malos sin medida;
Mas tu
presencia alegró mi vida,
Haciendo
más feliz lo destinado.
Tuve la
suerte de encontrarte un día,
Cuando
menos contigo yo soñaba;
Surgió de
ti, cuando no lo esperaba,
El gran
amor que más me convenía.
Mas ya
llegó el final de nuestra unión,
Rompiendo
el pasado y el presente;
Ya, nuestros
lazos los cortó la muerte,
Dejándome
tan sola , sin tu amor.
Si es
verdad que en el más allá existiera
la vida
eterna más feliz que aquí,
Estar
contigo de nuevo yo quisiera,
Para
empezar la eternidad sin fin.
Puri
Aguila.
Rosas y
espinas.
Para holer la fragancia de las rosas,
hay que pasar por las espinas antes;
las cuales nacen esquivas y
punzantes,
cual prueba demigrante y dolorosa.
Mas con el tiempo son flores tan hermosas,
Que vuelven el jardín en un paisaje,
Tan bello, con espléndidos ramajes,
Variedad de color y mariposas.
Así mi alma lamenta tu
ausencia,
añorando tu amor desvanecido;
Mas nunca serás parte del olvido,
Mis recuerdos evocan tu
presencia.
Yo busco los lugares donde un día,
Compartimos, el bien, estando unidos;
Mas ahora voy sola por la vida,
Impregnada de tu gran amor perdido.
Yo visito el lugar donde estuvimos,
Felices y risueños algún
día,
Mas ahora solo brilla tu
recuerdo,
Cual una estrella que alumbra mi vida.
Aunque tú no te halles a mi lado,
Yo me envuelvo en la luz de tu presencia;
Cual una rosa perfumas mi existencia,
Libre de espinas, tu amor me ha salvado.
Por el camino que tú me mostraste,
Día tras día yo me fortalezco,
De lo bueno y lo malo que
merezco,
Lo mejor de mi vida me entregaste.
Las rosas perfumadas, tu presencia;
Lo bueno, que perdí, tu compañía;
Tu gran amor son para mí las rosas;
Tu ausencia, que me mata, las espinas.
Puri Aguila.
La rosa de Sant Jordi.
La rosa de
sant Jordi, él me la regaló;
Durante
todo el tiempo que nuestro amor duró;
Mas este
año maldito, ya no la he recibido;
Pues no
tengo el consuelo de estar con mi marido.
Porque la
muerte impía, de aquí se lo llevó,
Truncando
nuestra vida, matando nuestro amor.
Es la
ofrenda más bella, del hombre a la mujer,
De la mujer
al hombre, un libro hay que escoger.
En toda
Catalunya en este día especial,
Las calles
están llenas de libros y de flores
Que inundan
el entorno de variados colores;
Se venden
tantas rosas, no se pueden contar.
El hermano
a su hermana, el esposo a la esposa,
Demuestran
su cariño, con espléndidas rosas.
El día de
sant Jordi, rosa y libro se dan,
Cual una
hermosa ofrenda, de amor o de amistad;
Amantes o
allegados, la van a recibir;
el más
bello regalo, que muestra aquel sentir,
De amor
apasionado, o cariño sin fin.
La rosa de
sant Jordi debemos aceptar;
Cual prueba
de cariño, Filial o fraternal,
O del amor
más grande, que hombre y mujer se dan.
Cual
amantes esposos, O detalle de amigos,
De hijos a
su madre, o de buenos vecinos,
el regalo
del día, son las rosas y libros.
Cual una
hermosa ofrenda de honor a la lectura,
Se rinde un
homenaje, a la buena escritura;
A los
grandes autores que promueven cultura.
Puri
Aguila.
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